Cada año lo haces, una lista de las cosas que tendrás que mejorar para el próximo y ya cuando vas por febrero has roto la mitad de las promesas que hiciste cuando te metiste toda la botella de sangría a las doce de la medianoche del 31 de diciembre. Sin embargo, este año será diferente porque te vamos a ayudar con resoluciones más sencillas que podrás celebrar que las lograste.
Tienes que tomar ejemplo de figuras conocidas de la isla del papelón y como dicen los viejos, aprender por cabeza ajena.