Comentario

Queen Wikipedia y su Rap(s)odia Anti-Bohemia

 

“Amar a la patria es mucho más que exaltar la bandera;

 

amar la patria es amar la gente.” – Vico C

Hace unos días, un joven estudiante de la Escuela Maestro Ladí de Vega Alta decidió hacer un rap como parte de un proyecto de su clase de Español y su expresión artística se hizo viral gracias a su contenido controversial. Hoy, el joven enfrenta las consecuencias de su creatividad: represalias por parte del sistema de educación pública, según denunció mediante un comunicado de prensa el gremio magisterial EDUCAMOS.

El joven Josué Bracero, segundo de derecha a izquierda, junto a compañeras del Colectivo de Escritura y su maestra de español Jessika Reyes Serrano. (Metro: Gil Reimundí)

Cualquiera diría que la razón para su regaño fue porque el joven cantó sobre sexo, drogas o violencia callejera, pero no. Él sólo se atrevió a criticar a la Secretaria de la agencia que hoy lo censura, con un artificio y dominio de su medio similar al de otros notorios raperos puertorriqueños.

No es sorprendente que esta haya sido la acción a tomar por el Departamento de Educación tras la brutal crítica de este joven a su presente administradora. Después de todo, no es una movida original pues es sacada del playbook de pasadas administraciones como la del exalcalde de San Juan Jorge Santini. Tras Residente y Calle 13 criticar al exgobernador Luis Fortuuño, Santini les prohibió hacer conciertos en San Juan durante varios años.

Tampoco es casualidad que las administraciones pro-estadidad sean las que impongan las más severas penas cuando se trata de censurar raperos que van en contra de su mensaje anexionista neo-liberal.

En los tiempos en que Rosselló padre era gobernador, Vico C era el rapero que el gobierno consideraba una amenaza (un “pariah”) no sólo por ser el líder by default del género desde sus orígenes underground, sino por cantar sobre las crudas realidades de nuestra sociedad (la pobreza, las drogas, la violencia doméstica, las guerras de barrio, el abuso policial, etc.).

René Pérez Joglar (Residente) tiene más de 25 premios Grammys y es primo de Lin-Manuel Miranda, el creador del famoso musical de Broadway, Hamilton. Residente, un nombre artístico trágicamente irónico, se ha visto obligado a tomar residencia en Nueva York porque en su isla no se le ha dado el reconocimiento que merece hasta recientemente y porque su música se volvió universal.

La música de René no tiene barreras y su musa al parecer es nómada porque su inspiración es el mundo. Incluso, muchos en su país de origen lo tildan de “desubicado”, “inadaptado” y “disruptivo”, pero al parecer no reconocen que esas son las características que usualmente distinguen al talento y la innovación.

Es un hecho que algunos de los raperos latinoamericanos más importantes de su género son puertorriqueños. El rap de por sí es un género musical controversial, por lo que limitar a la persona que lo escoja como medio artístico es acabar con su carrera antes de que empiece.

Y si aquí en Puerto Rico no sabemos reconocer lo extraordinario, en otros lugares del planeta lo harán. Este joven rapero de Vega Alta que hoy hizo noticia podría simplemente tomar la ruta que el resto de la diáspora boricua ha tomado. Este hijo del cañaveral se puede ir corriendo (o volando) despacito a otro sitio donde lo aprecien tan pronto se gradúe de escuela superior. La pregunta es: ¿dejaremos que se siga fugando el talento? ¿Seguirá el sistema fallándole a niños y niñas destinados a ejercer el arte como oficio?

Este joven vegalteño podría ser el próximo Vico C o Residente, y lo están tratando como si fuera un criminal por expresarse artísticamente. ¿A esto hemos llegado, como país? ¿O simplemente tememos al rap porque crea conciencia y porque es un género musical cuyos exponentes denuncian la violencia y la discriminación, tratando temas que el gobierno prefiere censurar en vez de darles exposición?

Muchos lo han dicho –y de mil maneras– pero Vico C. lo dijo mejor: “Oye lo que te conviene, no sólamente lo que te entretiene.” Irónicamente, el Filósofo del Rap de los 90s en Puerto Rico también es nuestro maestro en el 2018, teniéndo como siempre en este país el primer rap y la última palabra.

Cabe destacar que en la tarde del jueves, la Secretaria de Educación Julia Keleher expresó mediante un tuit que quisiera conocer a ese estudiante.

Ups, no se encuentra el tuit. ¿Tal vez lo eliminaron?

En mi opinión personal, el tuit no me parece muy genuino que digamos, aunque Tal parece que el Departamento de Educación tiene mucho que aprender de los estudiantes de sus escuelas –y del mismo género musical que trata de censurar. Como decía mi maestra de Español: en toda historia hay moraleja.

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