La salud se puede ver afectada por muchas maneras y a veces por cosas que hacemos todos los días y que pensamos que son completamente inofensivas. Una de esas cosas de la que hablaremos hoy, la cual usar audífonos todo el día. No, no es mentira.
Todo con medida
Bien se dice que todo en exceso hace daño y eso también es cierto cuando hablamos del uso de los audífonos, ya que estos te pueden hacer más daño de lo que crees.
Para empezar, el uso continuo y diario de los audífonos puede causar que el cerumen se quede atorado en tus oídos. Esto es porque las ondas de sonido a grandes volúmenes van empujando el cerumen de vuelta hacia adentro, neutralizando el trabajo que nuestros oídos hacen al empujarlo fuera de manera natural. Esto se hace peor cuando se usan audífonos de chícharo.
El problema es que eventualmente se frenará tanto cerumen que no podrás escuchar absolutamente nada y tendrás que visitar al doctor para una limpieza de oídos. Algo importante que se debe mencionar es que usar cotonetes solo empeora el asunto, no los uses nunca para limpiar tus oídos, solo empujan de vuelta el cerumen al oído.
Otra manera en que el uso de audífonos afecta tu salud es al causar trauma acústico, el cual puede hacer que comiences a perder la capacidad de escuchar a temprana edad. Así es como lo confirma Gonzalo Corvera Behare, director del Instituto Mexicano de Otología y Neurología.
Así que ya sea por daño a tus oídos o por el bloqueo de estos, usar audífonos todo el día y a un volumen elevado no hace más que dañar tus oídos.