Los hombres y las mujeres son bien embusteros. Aquí no se trata de que un género es mejorcito que el otro, sino que ambos grupos dicen mentiras por diferentes razones. Mientras que ellas mienten con alguna intención perversa o guiadas por la maldad que habita en su alma, ellos lo hacen para evitar meterse en líos o simplemente para que ellas no los fastidien.
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Es por eso que hoy te decimos 9 de estos embustes que ellos dicen para que no desate la furia que las chicas llevan dentro.
9. Sí, yo voy a arreglarlo
Esta mentira involucra dos cosas: nuestro ego y nuestra paz mental. La mayoría de las veces, los hombres no tienen idea de cómo van a arreglar la ducha o cuál es el ruido ese que está haciendo el carro, pero al decirle a tu pareja “yo voy a arreglarlo”, ellas se calman y uno gana tiempo… aunque eventualmente le metas mano al problema y termines empeorando toda la situación.
8. Beba, tú te ves linda con cualquier cosa
Ajá, ¿y qué podemos hacer? O sea, si ellas nos preguntan “¿me veo bien con esto?”, la respuesta más honesta quizás es “te ves bien chulita con esa cortina de baño” o “con esa blusa pareces la versión cafre de Glerysbeth, pero nadie tiene la babilla para decirle eso a ellas.
7. No, no vi a la muchacha esa (que estaba bien buena) de la que me hablas
Las mujeres saben cuando nosotros estamos mirando con el rabo del ojo a otras mujeres, y a veces nos lo dejan saber haciéndonos un comentario sobre la fémina. Mentimos porque no hay forma en que podamos responder y salir airosos en el proceso. Este tipo de pregunta es una encerrona, así que mejor hazte el loco, no seas honesto, no le digas eso que acabas de pensar… es mejor que INFARTES.
8. Intenté llamarte pero no tenía señal
Parece mentira que en el DOS MIL DIECISÉIS todavía digamos esta mentira como si viviéramos en Morovis, Utuado o Jayuya. Claro, esto lo decimos cuando vamos para un sitio que tu pareja va a pegar a fastidiar si se entera que estás ahí con “a mí nunca me llevas a esos sitios. Algo esconderás allí” o “¿y ese milagro que tú estás ahí metío?” con el mismo tono de un fiscal que tiene sed de ver a alguien preso. Es mejor pichar y luego venir con este clichoso embuste.
7. No voy a estar mucho rato, me doy un par de cervezas y voy pa’ casa
Cuando uno le dice a su pareja que va a ir a un lugar donde hay alcohol, ellas imaginan que es un sitio donde abundan las mujeres con un gran trasero, senos de embuste, todas quieren están puestas pa' ti, alcohol en exceso, orgías a plena luz y todo tipo de fresquerías. Una mujer nunca imagina que su pareja está tranquilamente hablando boberías de la NBA, sino que juran que el jevo la va a pasar tipo “The Hangover” en Las Vegas. Antes de que comience la cantaleta, tú dices el embuste y después te disculpas por haberte tardado CUATRO horas y llegar inunda’o de ron hasta las tetillas.
6. No me pasa nada
Sí, los hombres también se tiran esa clásica mentira, pero con menos drama que las chicas. Lo dicen para que ellas no empiecen con el cuestionario y la mil preguntas por minuto. Mujer, si tu caballerito te dice eso, solo déjalo quieto. Sí, lo sé: a ti no te importa, y no lo vas a dejar de fastidiar hasta que te responda.
5. Solo la veo como una amiga
Chicas, antes de que se alteren, piensen en el papelón que ustedes harían si él les dijera “pues sí, está bastante buena y me hubiese gustado salir con ella o al menos tener sexo con ella una vez, pero ya es tarde y estoy comprometido contigo”. Ok, me imagino que ya saben porque decimos lo primero. 🙂
4. Me encantó la comida
¿Qué se supone que respondamos si las vemos cocinar por horas y luego nos muestran el plato como si fuera el bebé fruto de la relación? Pues obviamente tenemos que decir que les quedó mejor que al Chef Piñeiro aunque el arroz esté tan amogollao que parezca que lo hicieron con chicle. Y ahora no vengan a decir que esto es falta de honestidad; no, señoras, esto es para evitar que se tiren un papelón rodando por la cocina, mientras cogen el arroz en su puño y maldicen habernos conocido.
3. Me encanta pasar tiempo con tu mamá (o papá)
Cuando un hombre quiere que una mujer se enamore de él es capaz de decir cualquier cosa. O sea, si él rara vez comparte tiempo con su madre, ¿por qué diante van a querer pasar un sábado con la madre de ella hablando de los bochinches de la familia? No es que todos detestan estar con la familia de ella, pero la mayoría sí… y nada puedes hacer.
2. Nunca pienso en otras mujeres
Amigas, sus fieles, buenazos y dulces maridos (o novios) piensan en mujeres ajenas TODO el tiempo. La mayoría de ellos no se atreven a ser infieles, pero si ligan e imaginan que tienen sexo con mujeres ajenas. Esto no significa que no las amen a ustedes… ¿o sí? Anyway, ellos nunca dirán que anoche tuvieron un sueño que involucraba coito y a la vecina. Incluso, ellos prefieren mentir sin pestañear y decir que no les gusta nadie en el mundo tanto como usted… ni la mismísima J-Lo.
1. Nunca alguien me había gustado tanto como tú
Sí, sé que esta te dolió mucho. Pero seamos sinceros: ¿prefieres escuchar que eres como la tercera en el ranking de las mujeres que más le han gustado? ¿Verdad que no? Pues cuando la escuchen, picheen… aunque sepan que no es verdad. Total, nosotros ya estamos acostumbrados a cuando ustedes dicen “nadie me lo había hecho como me lo haces tú”. Estamos a mano.