Todos los años, durante marzo, residentes y visitantes se congregan en Komaki, al norte de Nagoya para tener una verdadera celebración fálica, como parte del tradicional Festival del Pene, conocido como Honen-sai en la religión Shinto.
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Este festival de la mandoca se celebra todos los años y atrae a miles de turistas. La celebración es para exaltar la fertilidad masculina aunque, vamos, todos sabemos que el pene no es nada sin los verdaderos huevos: los de la mujer.
El festival arrancó el viernes 15 de marzo, en un altar shinto en Tagata. Este festival masivo contiene todo tipo de objetos en imagen de pene. Hay estatuas de basturrios, bizcochitos en forma de bichos, globos en forma inmensos miembros que hacen recordar al prieto de Whatsapp, en fin.
El pene de madera más grande que se pueda hacer de un árbol ciprés es cargado por varios hombres durante un festival.
Los que participan del festival – claro, los que no van allí a joder – le oran a las deidades japonesas en espera de que los premien con un hijo.
Como en El Calce no pudimos ir este año al Festival del Pene – y eso que damos fe que nuestro reportero Joito Encarnación intentó por todos los medios llegar a este carnaval de matracas – aquí les traemos un festín de fotos, cortesía de los lentes de SIPA USA y Metro World News.
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