El científico de la computación e inventor de Internet Tim Berners-Lee, ha señalado en una reciente entrevista, que el mundo estaría pronto a vivir una inminente “distopía digital” en el caso que no aborde actuales amenazas a través de la web.
Para Berners, las amenazas radican en la desinformación que actualmente se genera en la web, como también la actual invasión de la privacidad, acción condenable que muchas compañías, según él, no estaría respetando.
Es por esto que, el informático reiteró su llamado para realizar un “Contrato para la Web”, con el cual los gobiernos, las empresas y las personas puedan salvaguardar sus datos mediante la implementación de 9 principios clave.
Internet y la distopía
Las llamativas nueve propuestas fueron realizadas por la fundación World Wide Web, la cual está a cargo de Berners-Lee. Entre su propuesta principal está el terminar definitivamente con el aumento de las diversas amenazas en línea.
Recordemos que el pasado lunes, el informático lideró una conferencia en la cual expuso todos los riesgos que el mundo debe estar preparado para enfrentar la nueva problemática de Internet.
En la ocasión sus palabras fueron las siguientes ” Si no nos dedicamos a defender la web libre y abierta, corremos el riesgo de una distopía digital de desigualdad arraigada y abuso de derechos”. A raíz de esto, para Berners la firma del acuerdo es sin duda una de “las mayores oportunidades determinantes para nuestro tiempo, ya que con esto podremos evitar que la web sea mal utilizada por aquellos que quieren explotarla, dividirla y destruirla”.
Durante el último tiempo este “nuevo contrato para la web” ha recibido un gran apoyo, en las cuales hay 160 empresas entre las que destacan Facebook, Google y Microsoft, quienes dieron a conocer la información a través de un comunicado de prensa.
Por otro lado, algunos Gobiernos también han entregado su apoyo, entre los que destacan Francia, Alemania y Ghana, quienes también fueron firmantes de este nuevo contrato que, según Berners, podrá salvar la World Wide Web cómo la conocemos.