Tendencias

Conoce lo que no sabías de la "defensora de las chapiadoras"

El pasado martes escribí un artículo dándole unos consejitos a Carlos Correa para que se cuidará de las &#39chapiadoras&#39. Como era de esperarse, levantó ronchas en algunas personas.

PUBLICIDAD

Resulta que una tal &#39miss whatever&#39 (disculpen mi ignorancia, pero yo no sé mucho de esos concursos de “belleza” inútiles) se picó con mi artículo y quiso dejármela caer, lo que no es nada malo porque todos tienen derecho a opinar cuando les dé la gana.

En su entrada la chica se fue en un rant del “machismo”, de que “los tiempos han cambiado y la mujer no es propiedad del hombre” (algo que TODOS estamos claros, no es como que descubrió América), que “a los hombres no se les juzga por su dinero” (claro, se les juzga cuando NO lo tienen, pero ese es otro tema) y de manera encomiable mezcló el fundillo con la primavera.

Pero vamos por partes. Desde el comienzo de mi artículo, se definió lo que era una chapiadora.

“Ok, no hay na’ malo en que una persona se preocupe por su estabilidad financiera… ahora, la diferencia entre una chapiadora y una mujer que le gustan las cosas buenas, es que la chapiadora probablemente te dejará si te lesionas y te quedas pelao. Es obvio que por tu nueva fama te caerán muchas chicas, pero una interesá solo buscará qué puede sacarte”.

Yo no quisiera entrar en dimes y diretes con alguien que claramente no entendió la diferencia entre una cosa y la otra. Quizás para la próxima uso láminas para los que tienen la mente un poco más encajonaíta. Repito: existen mujeres que salen con tipos adinerados, pero no porque lo necesitan para mantenerlas, ya que ellas tienen lo suyo y son independientes, sino porque prefieren un hombre de cierto nivel económico o estatus.

Ahora, están las chicas que solo buscan caballeros (especialmente deportistas, reguetoneros, bichotes) para obtener bienes materiales y dejarlos cuando estos ya no tengan &#39torta&#39. El termino “trepadora” o “gold digger” no es nuevo. Podrán “justificarlo”, pero no le hace bien a la lucha por décadas que ha tenido la mujer por la igualdad.

Lo que sí me estuvo curioso es el porqué esta chica decidió contestarme. “El que se pica, es porque ají come”, es un dicho muy popular, pero yo prefiero este: ¿cuál es la perse, amiguis?

Así que decidí buscar un poco de información de esta chica, pues lo único que me habían dicho de ella es que competía por “belleza” (algo tan tribal, arcaico y machista) y cargaba muy orgullosa una fina cinta con escarcha.

Pues resulta que la beldad estuvo en un reality show llamado Ready for love, en el que más de 30 mujeres competían por el amor de un caballero… pero este caballero no era un Juan del Pueblo, un Jovani Vázquez o un Melwin Cedeño, sino el “magnate” Ernesto Argüello. Hay que destacar que el ingeniero y filántropo fue el ex de Eva Longoria (productora del programa) y que seguramente el reality más monta&#39o no podía ser.

Tomo las palabras de la miss prestadas, y la cito: “a los hombres tampoco se le juzga por su conducta de utilizar el dinero y fama para tener acceso a mujeres, y tratarlas como objetos, al contrario se les reverá por eso”. ¿Acaso la señora Reyes voluntariamente no fue parte de un show en donde un tipo rico escoge con quién va a terminar y donde ponen a las concursantes a los servicios del riquitillo?

Este tipo de programa promociona el que un hombre tenga varias chicas rindiéndole pleitesía, obediencia y sumisión solo para que las escoja… ¿señora, se peina o se hace rolos?

La amiga seguramente se enchismó por esto que le aconsejé a Carlos:

“Tú no quieres estar con una &#39miss’ que solo te usará para el faranduleo, pues es harto conocido que las misses se pegan de atletas para saciar su sed de salir en portadas. Recordemos que las reinas de belleza duran en los medios lo mismo que a Derrick Rose le duran las piernas saludables”.

Vamos a ser sinceros: las misses son estrellas fugaces. Hasta una Denise Quiñones que ganó el máximo certamen, ha dado tímidos pasos en la actuación y su relación con Calle 13 hizo más ruido que su éxito luego de Miss Universe. Solo algunas como Desirée Lowry pudieron mantenerse en los medios, pero las demás no. ¡Y qué bueno! Que se dediquen a otras profesiones, porque eso del faranduleo es una cosa mala. Seguro usted siempre se ha enfocado en su carrera profesional, y no en estar en los medios de comunicación ni nada de eso… ¿o me equivoco?

Voy a tomar algo que usted le dijo al periódico Primera Hora en abril de 2013.

O sea, ¿usted decidió en aquel entonces poner en &#39hold&#39 su futuro profesional, para ir a un programa de &#39trash tv&#39 a servir de &#39bimbo&#39 para un bambalán? Claro, eso es problema suyo, pero parece que lo que dije de las misses tampoco es una total mentira.

Amiga, en su post usted tiene buenos puntos… pero en nada tiene que ver con lo que es una &#39chapiadora&#39. Nadie se opone a que las mujeres escojan con los hombres que quieren estar, ni queremos tenerlas enjauladas ni nada de ese machismo del siglo 19 que las seudo feministas quieren halar por los pelos cada vez que se critica algo de las mujeres. Se criticó un comportamiento, así como en varios de mis artículos he criticado a políticos ñoños, hombres bambalanes y reguetoneros.

A mí me da bastante risa que cuando se tocan otros temas, uno es “punzante” y “habla lo que nadie se atreve”; pero cuando el tema involucra una mujer, rápido dicen que “uno es machista o misógino”. ¿Es eso igualdad? Si realmente usted quiere fomentar la igualdad de género, no saque la “mujer card” cuando le conviene. Sí, hay mujeres trepadoras… y hombres también.

By the way, le deseo mucho éxito la próxima vez que desee competir “por el amor de un magnate”. Espero que esta vez triunfe.

Tags

Lo Último