La Comisión Europea, que se encarga de supervisar a las cientos de plataformas sociales, abrió una investigación en torno a X (antes Twitter), empresa del multimillonario Elon Musk.
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Las acusaciones, dadas a conocer el pasado viernes, son las primeras invocadas bajo la Ley de Servicios Digitales (DSA) y dejan ver las intenciones del órgano político hacia una regulación más estricta de las plataformas en línea en la Unión Europea (UE).
En su argumento, la Comisión destacó varios problemas con las prácticas de X.
El primer punto de controversia es la política de verificación azul de la plataforma. Inicialmente, estos verificaciones estaban destinados a comprobar usuarios como funcionarios gubernamentales, figuras públicas y periodistas, limitando así la desinformación.
Sin embargo, bajo la propiedad de Musk, la política cambió, permitiendo a los usuarios comprar cuentas con verificación azul. Este cambio ha sido explotado por actores malintencionados, lo que ha llevado a la suplantación de figuras como la política estadounidense Hillary Clinton y la autora J.K. Rowling.
Bajo esta contexto, la Comisión declaró que la política de verificación azul de X es “engañosa” y ha sido abusada, engañando a los usuarios para que confíen en contenido que no necesariamente es creíble.
Otra violación significativa de X citada por la Comisión involucra la obligación de la red social de proporcionar un repositorio de publicidad confiable.
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La plataforma tampoco proporcionó un acceso adecuado a sus datos públicos para los investigadores, dificultando aún más los esfuerzos para rastrear y limitar la propagación de desinformación.
Las infracciones de la DSA podrían resultar en sanciones sustanciales, con multas de hasta el 6% de los ingresos globales de X. Ahora bien, la red social tendrá la oportunidad de defenderse de las acusaciones y proponer medidas para abordar las preocupaciones de la UE.
Dicho esto, la Comisión Europea continúa investigando si X ha violado otras normas relacionadas con la propagación de contenido ilegal y si la plataforma ha tomado medidas suficientes para frenar la desinformación.
Como la primera prueba importante de la DSA, el resultado de las acusaciones contra X podría sentar un precedente de cómo la UE maneja casos similares en el futuro, potencialmente remodelando el panorama de la regulación de redes sociales en Europa.
Las acusaciones contra X son parte de un esfuerzo más amplio de la UE para hacer cumplir la DSA en las principales plataformas en línea. La UE también ha lanzado investigaciones sobre empresas como AliExpress, Facebook e Instagram de Meta y TikTok, centrándose en problemas como la insuficiente protección al consumidor y los algoritmos adictivos.
