Jarana

VIDEO: Aquel duelo de estiércol entre Alejo Maldonado y Kobbo Santarrosa

Tú sabes qué estás pata abajo en lo porcino cuando el poster child de la corrupción policiaca en Puerto Rico te acusa de lechón.

“¿Te levantaste ya, Kobbo? ¡Levántate!”

– Alejo Maldonado

Así comienza un recital de poesía barroca el Garcilaso De la Vega del sistema correccional federal estadounidense, Alejo Maldonado, uno de los policías más corruptos que ha existido en la historia de la Uniformada.

Fue hace una década cuando Maldonado, mezquino perseguidor de independentistas y filósofo erudito en el arte de la choteaera policiaca, le dedicó un mar de versos amorosos a Antulio Santarrosa, a quién apodan Kobbo, titiritero profesional y voz de la muñeca chismosa que aún sigue en el aire, La Comay. Santarrosa se encuentra bajo fuego tras señalamientos de que sexualizó la figura de una niña, cuando habló de la hija de la candidata a la gobernación por el Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), Alexandra Lúgaro, e insinuó alguna conducta indebida pro parte de su pareja, el representante Manuel Natal Albelo, aspirante a la Alcaldía de San Juan.

“El único individuo que tiene pergaminos múltiples que lo certifican como mentiroso extraordinario es Kobbo. En el caso de Adolfo Krans un tribunal determinó que era un manipulador, un mentiroso, por eso te hicieron pagar billete”, comenzó a declamar Maldonado, cual Gallego en el Nuyorican Café de San Juan, pa’ los tiempos en los que JuanRa abría la barra pa’ los poetas y Ayala se metía la baño a darse los tustis.

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“Reincidiste y de nuevo fuiste donde una señora casada y te pusiste a decir que a esa mujer la había preñao’ al chofer, el tribunal te certificó como mentiroso extraordinario, el único individuo que tiene una certificación oficial de traqueteador múltiple es Kobbo Santarrosa, por ese lado, pues te cogieron en las mentiras”, agregó, haciendo que a poetas como el literato dominicano que apodan El Bronco #1, se le aguaran los ojos.

Y entonces, Alejo zumbó un par de jabs que aturdieron la anatomía de Kobbito. O sea, venga, esto, según don Alejongo, “son cosas de varones”. Ay, santo.

“Llevaste esto a lo personal, son cosas de varones. Si yo abro la tapa de la cloaca mas inmunda y de ahí sale la rata mas inmunda con las narices y bigotes embarrá’s en excrementos, pues al lado tuyo, esa rata hace lo indecible por proteger a sus crías. Tú tienes una cría que te ha llevado al Tribunal, lo que las ratas inmundas no hacen, tú lo haces. Para que me comparen con una rata inmunda, que me digan exconvicto”, apuntó.

Ave María, qué barbaridad to’ eso, teniente. Pero, pérate, Balba: ponle tensión a Kobbo, que eso le gusta. Resulta que don Alejónguingui también insinuó que Kobbo estaba en un lío ahí de pornografía infantil… digo, zumbó un clache de entrelíneas ahí…. Y tiró al medio ni que unas chillas. Chico, Alejo…

“Por otro lado, si lo sigues llevando a lo personal te puedo decir un montón de cosas que rayan en lo personal y uno no quiere entrar en detalle [ahí].  Por ejemplo, aquellos sectores por Playa Azul, cerca del apartamento que tenía Nora Plaza, gente con nombres de Susan, de Debora, ¡qué muchas mentiras le dijiste! Yo me voy a divorciar y me voy a casar contigo. Usté es un mentiroso por un lado y por otro, usté no escatima ni con las mujeres ni con nadie”, apuntó, indicando que “para que la gente se le pegue”, tiene que “regalarle jueguitos de mueble ala de la financiera”.

Yo no quisiera tener que meter la mano en ese saco que tengo de Kobbo y empezarlas a sacar. Acuérdate, Alejo Maldonado fue un individuo que cometió delitos en la calle, y por ellos pagué todo, los señalé todos. Aún hay gente que estaba envuelto en pornografía infantil, de gente que las vendía, porque hay coleccionistas que guardan eso en sobrecitos de plásticos, y tienen las huellas de quien se las ponía en su mano, eso es el tipo de cosas de las que tienes que cuidarte, evitar que la gente señale cosas que ya quedaron en el pasado y a lo mejor tu sobresaliste [SIC] de de esos asuntos”, expresó.

¿Cómo era la frase aquella? Ah, sí… qué bochinche…. o algo así.

 

Aquí está el audio, está medio inmamable, pero ahí está… Entren a su propio riesgo…

 

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