Hace unas semanas se llevó a cabo la convención del Partido Nuevo Progresista (PNP), a donde sorpresivamente llegó el rey del chichaíto y las cervezas malas en Puerto Rico, Luisito Vigoreaux.
Los estadistas celebraron la llegada del vigorizante a quien le ofrecieron Budweiser y ron de Minnesota porque los estadistas no beben Palo Viejo. Como Luisito se deja llevar y se bebe hasta el ron de alcantarilla se fue a vacilar con ellos.
Sin embargo, el estadista que vive en Luisito ya se mudó porque desde el Partido Popular Democrático (PPD) el experto en jangueos y veterano de las Fiestas de la Calle San Sebastián, Aníbal Acevedo Vilá lo invitó a unos traguitos más finos que los que le dio Georgie Navarro.
Aníbal logró su cometido y publicó la foto con Luisito en su Twitter.