Jarana

Las criaturas de las elecciones 2024

Lee la columna de Tío Macetaminofén.

¡Amiguitos, lle-lle-lle-lleguéeee! Tío Macetaminofén, el mismo que cuando tiene ganas de ir al zoológico se tira para el pueblo de Guayama, hoy vuelve a El Calce para el post mortem de las elecciones 2024. No, no vengo a hablar de los resultados, pues hay que aceptar el mandato de la mayoría, pero voy a dejar claro que durante estos cuatro años van a leer y escuchar muchos chistes sobre la obesidad. Changuitos, les recuerdo que los comentarios sobre gordos, impedidos y chinos son de mis favoritos, así que vayan buscando los Kleenex.

Durante el proceso eleccionario hay mucha gente que se pone inmamable -solo basta leer en las redes a muchos loquitos-, pero hay unos seres que botaron la bola y se robaron el bate. Vamos, pues, a hablar sobre las criaturas de las elecciones 2024.

Rey Charlie

Misael González Trinidad se ganó el cariño del pueblo durante el verano del ‘19. Hay que recordar que aún hay gente que recuerda esos días con la misma emoción de ese pana que cuando está borracho te habla de la ex. Durante aquellas famosas protestas, Charlie -quien domina a la perfección el idioma simioñol- activó a “los jinetes de la brea” para meterle presión al exgobernador Ricky Pizza Rosselló.

Este trujillano era una especie de Bejuco que cantaba “Yo quiero un pueblo” en un karaoke motorizado por todo el Viejo San Juan. Su impacto fue tanto que la periodista Valeria Collazo Cañizares le hizo una profunda entrevista, en donde este reveló que siendo un niño descubrió que “era diferente al resto de sus amigos”, pues podía trepar árboles con mayor rapidez que los demás.

Poco duró el amor del país por este chico con alma de tamarindo, al revelarse que era fanático del PNP. Honestamente, no sé por qué lo odiaban por esto, ya que Charlie es el molde de lo que es un penepé de a pie: cafre, de rostro amorfo, y un amante del merengue que no domina el inglés.

En la primera semana de noviembre, y sin que le temblaran las dos neuronas que tiene trabajando overtime, el embajador de la monarquía naca endosó a la ahora gobernadora Jenniffer Aydín González, provocando la ira de todos los que viven en la burbuja del Internet. Yo estoy segurísimo que ese apoyo de Rey fue importantísimo, ya que sus seguidores son similares a JGo: se transportan en Can-Am, adoran el desorden, compran cosas por Temu y Shein, y les encanta meterse al cuerpo las abusadoras combinaciones de arroz chino con carne de gato pepper steak.

Kiko Blade

Ramón Blade Nuñez es uno de los comediantes menos queridos de la isla. De hecho, Puerto Rico prefiere darle otra oportunidad a Víctor Fajardo administrando el budget de Educación que apoyar a Kiko en su trabajo. Por cierto, en estos días un vecino de la tercera edad me dijo que “Kiko era la versión sin gracia de Judith Pizarro”. La semana pasada el artista de higiene cuestionable animó el cierre de campaña del PIP, pues le facturó al partido menos de lo que cobra el señor José Valiente, quien firmó con SBS por menos de lo que cobraba en La X, y exigió como bono una libreta de descuentos en Burger King.

Luego de que Juan Dalmau suplicara por el voto de los estadistas, el señor Blade dijo que “los penepés eran unos cabrones” y que “el problema de las mujeres pobres y cuponeras era que estas son más fértiles y pa’ joder solamente paren penepés”. Por culpa del eslabón más débil de “El Remix” en WAPA, Dalmau perdió miles de votos, y ahora está Top 3 en las cosas que menos desean los puertorriqueños: 3. La independencia. 2. Una conversación con Ana Irma Rivera Lacén. 3. Respirar al lado de Kiko Blade.

Yovin

José Yovín Vargas Llavona es, sin duda alguna, la persona que peor la pasó durante esta campaña electoral. No olvidemos que este simpático chico de cintura ancha, alma pícara y senos erguidos no viene de la política, ya que -antes de ponerse los muslos de JGo como audífonos- tenía una vida tranquila en el área oeste. Su amor por la primera mandataria es algo real, y su mirada delata la ternura que siente por ella, pues cargan el mismo brillo que los ojos de ella frente a una caja de donas. “El bartender de leche” -como lo bautizó su esposa- tuvo que enfrentarse a lo peor que puede hacer un blanquito riquitillo: codearse con la gente cafre.

Yovín -quien carga el coqueto busto que Tita Guerrero desearía tener- es un buen tipo que sacrificó su carrera como modelo de scrubs en Aguadilla para ser primer damo del país. Aunque muchos piensen que es tarea fácil, solo recuerden que su labor será sonreír todo el tiempo fingiendo que todo está bien, mientras el pueblo hace memes diciéndole “tetón”. Acho, Yovín, como hombre con senos te llevo arreguinda’o del cora, pana mío. ¡Tienes que aguantar el calentón por paL de años, papeh!

Arte Cardé y Bryant Myers

Si Chente y Jay Fonseca son la versión podcastera de Pinky y Cerebro, Cardé y Bryant son el Sponge Bob y Patricio del mundo urbano. El artista pepiniano -conocido por ser adicto a la pauta- estuvo meses analizando las encuestas de Jugando Pelota Dura, pero fue cuando escuchó las predicciones de la mentalista Vivian Carla que decidió endosar a la señora que huele a pan González.

Cardé le entregó una de sus conocidas evoluciones a la política con la promesa de que si estaba ganaba las elecciones, pondría un Walmart en San Sebastián. Luego de ganar la contienda, JGo lo bloqueó de todas sus redes.

Por su parte, Bryant se enteró que Dalmau perdió las elecciones, así que decidió amenazarlo por los stories de Instagram. Aquí no nos sorprende lo mucho que se tardó el señor Myers -este se graduó de cuarto año sin ni siquiera dominar la tabla de multiplicar del 1 al 5-, sino que insinuara que iba a agredir a alguien, cuando fue el mismo Bryant que dejó a la mai botá con unos secuestradores y se tiró del carro. Este reggaetonero es más bravo con un candidato derrotado que con los peores títeres del mundo que atentaron contra él. Mera, Bryant, eso no es de gansteL.

Ray Cruz

Sé que la mayoría de los lectores estarán ahora mismo pensando “¿quién carajo es Ray Cruz?” y se entiende porque este fanático del jugo de hombre penepé desde hace muchos años es irrelevante. La semana pasada yo escribí una columna llamada “Carta a Juan Dalmau” en la que apoyaba -Y ME SOSTENGO- del candidato por el partido independentista, y a muchos penepés (incluyendo a Ray) no les gustaron mis palabras… ¿y qué yo siempre he dicho? Que tienen una opción: sacarme las palabras del cuerpo.

Anyway, Ray -conocido por ser un acérrimo hincha de los calzoncillos de Luis Fortuño- lleva un tiempo desde una ratonera en Estados Unidos tratando de ganarse la confianza del PNP para regresar a la isla, ya que tuvo que salir del país porque nadie quería darle trabajo. El señor Cruz Cruz -pues sus padres son primos- escribió lo siguiente:

A Ray -que es tan bruto que hace lucir a Bryant Myers como un nene de la Sociedad Nacional de Honor- le enojó mi escrito porque es el tipo de animal que piensa que las elecciones son el juego de la soga. El expresidente de WIPR -recordado por no querer pagarle el sueldo que le debía a un paciente de cáncer- es de esta gente que se fueron de Puerto Rico, y desde el carajo están echando pilas para que los boricuas estemos guerreando entre nosotros.

Para que sepan, Ray una vez montó una emisora cristiana y pretendía que el gobierno le diera unos fondos para guisar con una gaceta conservadora. Obviamente -y porque Dios así lo quiso- no pudo sostener la operación, dejó a paL de gente sin pagarle y terminó por Florida durmiendo en el piso. Como Ray hay muchos porque este tipo de imbécil lo encuentras desde la izquierda hasta la derecha; son personas que nunca van a volver a su tierra porque les encanta la estadidad, tirapiedras con sueños rotos que solo quieren ver cómo los bandos se hacen cantos.

A ti, Ray, te digo que yo voy a seguir fajándome por mi país, dejando el cuero en Pe Erre porque mi sueño es lograr las metas en mi isla; mientras tú estás en el carajo hablando ñoña y suplicando volver a chupar de la teta de Yovín gubernamental. Acho, Ray, ¿sabes qué está bien cabrón? Tener la conciencia tranquila, dormir con el amor de mi vida, beberme una taza de café viendo el verde de Cupey, y tener el cariño y el respeto de mi pueblo. Ojalá tú pudieras entender esto, pero por ser sendo lechón nadie te quiere, ni en los medios de Pe Erre… y menos en el área sur.

Bueno, coro, ya la decisión de los boricuas está tomada, y ahora vamo’ a ver qué va a pasar. De corazón, me gustaría que JGo lo hiciera bien porque yo quiero que mi país eche pa’ lante -pa’ que los nuestros vuelvan a casa-, pero mi instinto me dice que esto no será fácil, pues no hay nada más rencoroso que una gorda. ¿Viste? Lo volví a hacer… yo les dije que me encantan esos chistes de gordos. ¡Ah, y yo no me disculpo! ¡Suave, corillo! 🦍🫡

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