El Yulingrado sigue ganando terreno con su política exterior, a pesar de que en su base municipal anda en crisis ante la salida de sobre una treintena de fieles arrepentidos. Su líder, doña Carmen Yulín Cruz Soto —terror comunista para muchas almas perdidas— continúa conquistando corazones en Estados Unidos. Y lo volvió a hacer en una visita a un juego de Grandes Ligas.
La comandanta suprema del kremlin de San Juan se puso la camiseta de los Bravos de Atlanta y saludó a medio mundo al ladito de Bob Costas, leyenda de la cobertura de la acción de las Mayores.
Cabe destacar que los Bravos no son los primeros que sacan a Yulín a dar una de sus vueltitas para cosechar relaciones públicas, pues los Mellizos de Minnesota picaron alante y la convirtieron en una pitcher profesional de Grandes Ligas.
Después de aquella pichaera en el Target Field la camandanta llegó bajando rectas a 100 millas por hora en conferencias de prensa.
Nada, que doña Yulín volvió a darse una vueltita y, como aquí en El Calce somos fuertes críticos de las temibles y peligrosas dictaduras de la cuenca caribeña, pues lo reseñamos. El pueblo merece conocer la verdad y solamente la verdad. Amén.
