Dicen que las cosas buenas vienen en frascos pequeños. Mi abuela siempre decía que el veneno también venía en frascos pequeños. Este es el caso de Wilfredo Rivera. Con tan sólo 20 años, el winger del Orlando City tiene en la selección de Puerto Rico una gran plataforma en donde puede demostrar al universo de que está hecho. Con tan solo 5 pies y 6 pulgadas de estatura, Wilfredo Rivera, fácilmente, es el dolor de cabeza más horrible que cualquier defensor puede enfrentar.
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Anoche, Puerto Rico derrotó a Aruba 1-0 en un partido sumamente reñido. Yo le hubiese llamado a este partido “Wilfredo y sus amigos”. Mano, lo que hacía no tenía explicación. Dominaba la cancha de lado a lado, tanto ofensiva como defensivamente. Wilfredo tuvo sus intentos al arco, y hasta concretó una asistencia. Pero verlo mover el balón en el campo me recuerda a la historias que el abuelo Wilfrido le hacía sobre Pachin Vicens en el baloncesto.
“Ese Pachin era otra cosa, se paseaba a la defensa”. Wilfredo Rivera hizo exactamente eso mismo. Los tobillos partidos estaban que hacían estragos. Los dejaba pegados y la única manera de detenerlo era dándole alguna falta. Esto no detenía a Wilfredo, pues rápidamente se ponía de pie y hacía su magia. Wilfredo juega para el Orlando City B, pero con su desempeño en la selección de Puerto Rico, sería sumamente lógico que cualquier equipo de MLS o Liga MX diga: “Esto es lo que yo necesito”.
El muchacho es una pieza sumamente mercadeable. Tiene flow, estilo y las nenas estaban locas con él. Tiene el fundamento de fútbol y la habilidad para hacer magia. Sólo necesita una oportunidad, pero el nivel lo tiene. La selección es dichosa de contar con una pieza como él, que motiva a cientos de jóvenes en la isla a perseguir el sueño de ser jugador de fútbol profesional.
El Presidente de la Federación Puertorriqueña de Fútbol, Iván Rivera, nos platicó sobre el proyecto de la selección. Dejó claro que Wilfredo es una pieza clave en la selección y la intención clara de continuar permitiéndole brillar a nombre de Puerto Rico.
Iván Rivera: “La participación de Wilfredo ha sido vital desde que comenzó mi proyecto con la federación hace 5 a 6 años. Wilfredo tuvo un juego muy similar, muy protagónico, en una eliminatoria contra Trinidad y Tobago aquí. Fue el primer partido luego del COVID y él tenía sólo 17 años. Para mí, ha sido uno de los jugadores más esenciales de este equipo. No importa el cuerpo técnico. No importa sus compañeros. Él viene a hacer su trabajo. Siempre ha estado comprometido con el equipo, que es sumamente importante también aplaudirle eso y ha venido a todo. Creo que es una muy buena oportunidad. Él también sabe que la selección es su vitrina. Él es un protagonista en esta selección y puede ser la vitrina que le falta para dar ese paso en el club”.
Charlie Trout, dirigente de la selección de Puerto Rico, habló con Michael Morales Torres sobre a quien cariñosamente apoda Willy. La comparación con la construcción física de Maradona fue muy acertada. Resaltó la habilidad mágica de Wilfredo en el campo.
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Charlie Trout: “Nosotros sentimos que Willy es un ganador de partidos. Viene en un molde más pequeño. Está construido similar a Maradona. Tiene la habilidad de frenar y cambiar direcciones. Es muy difícil para sus oponentes lidiar con él. Puede crear un poco de espacio para concretar eso”.
“Él marca faltas en momentos muy importantes y cuando más lo necesitábamos”. “Hemos visto su progreso y lo estamos retando para que tenga más impacto en los partidos. Contribuyó mucho cancha a cancha”.
“Sabemos las fortalezas a Willy y vinimos aquí a impulsarlas. Él sabe que será mejor. Es un buen muchacho. Eso es lo hermoso. Ellos (los jugadores) quieren llegar, aprender y ser mejor”. “Él está muy feliz”.
El futuro es brillante para Wilfredo Rivera. Todo es cuestión de tiempo para que suba al club principal de Orlando City. Pero si ellos no lo ven a tiempo, Willy podría ser fichado por cualquier otro club dentro de la misma MLS, pues talento sobra. Mucho se habla de Jeremy y Leandro, pero, respetuosamente, sin Wilfredo Rivera no hay motor para el vehículo. Así de vital es su rol. Así que, como diría mi abuelo, Wilfredo es el Pachín Vicens del fútbol puertorriqueño. Les deseo éxito a los defensores internacionales intentando detenerlo, y espero que tengan seguro médico para sus tobillos.
