Un hombre en Australia descubrió con sorpresa, al regresar a su casa, que el techo de la cocina se derrumbó por el peso de dos grandes pitones que aparentemente se disputaban una hembra.
David Tait entró a su casa en Laceys Creek, estado de Queensland, el lunes y halló un gran trozo de su techo sobre la mesa de la cocina.
“Sabía que no había llovido, así que me puse a buscar la causa”, dijo Tait a la emisora Nine Network el martes.
No tardó en hallar a los culpables: eran dos pitones de 2.8 metros de largo que habían reptado a un dormitorio y la sala. El peso combinado de las dos serpientes —que no son venenosas— era de unos 45 kilos.
El cazador de serpientes Stephen Brown las atrapó y se las llevó.
“Diría que eran dos machos que se disputaban una hembra que se encontraba en el techo”, dijo Brown, quien sospecha que la hembra aún estaría en el techo o en las cercanías.
Los machos fueron regresados a su medio silvestre.
Ahora les presentamos un par de pitones australianas comiéndose unas mangostas: