Luka Modric rompió el duopolio de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, al conquistar el lunes el Balón de oro por primera vez en su carrera. Por su parte, la delantera noruega Ada Hegerberg se proclamó como la primera ganadora del trofeo en la categoría de mujeres.
El argentino Messi y el portugués Cristiano habían acaparado todos los Balones de Oro entregados desde 2008, y habitualmente figuraban como los únicos candidatos con posibilidades reales de obtener el máximo reconocimiento individual en el fútbol.
En tanto, la lucha de las mujeres por su reconocimiento en el fútbol dio un gran paso con el galardón a Hegerberg.
Modric se coronó en la Liga de Campeones con el Real Madrid y guio en julio a Croacia hasta la final de la Copa del Mundo en Rusia. El volante fue votado el mejor jugador del Mundial.
“De niños, todos tenemos sueños. El mío era jugar para un gran club y ganar trofeos importantes”, dijo Modric. “El Balón de Oro era más que sólo un sueño para mí, y es de verdad un honor y un privilegio sostener este trofeo”.
Cristiano fue segundo en la votación, seguido por el delantero francés Antoine Griezmann. Otro francés, el astro adolescente Kylian Mbappé, figuró cuarto, mientras que el astro brasileño Neymar, tercero el año anterior, cayó esta vez al duodécimo puesto.
Messi se ubicó como el quinto más votado, tras ser segundo respecto de Cristiano en los dos años anteriores y figurar entre los tres principales candidatos cada año desde 2007.
Modric jamás había estado entre los tres aspirantes principales.
“El 2018 es un año de ensueño para mí”, dijo Modric, de 33 años. “Durante mi carrera me percaté de que el trabajo duro, la perseverancia y creer en ti mismo durante los momentos difíciles son las bases del éxito”.
El padre de Modric apareció en una pantalla gigante, mientras se enjugaba las lágrimas durante la ceremonia en el Grand Palais de París.
Cristiano no pudo conseguir un sexto trofeo, con el que hubiera impuesto un récord y rebasado a Messi. El último jugador distinto a Cristiano y a Messi que había obtenido la distinción era el mediocampista brasileño Kaká en 2007, cuando militaba con el Milan.
Cristiano ganó la Liga de Campeones junto con Modric, antes de marcharse a la Juventus. Marcó tres goles contra España en un partido del Mundial, pero no alcanzó mayores éxitos, pues Portugal fue eliminado por Uruguay en octavos de final.