Cuando en Puerto Rico se habla de Golf, es inevitable que la memoria de Juan Antonio “Chi Chi” Rodríguez se manifieste. “Chi Chi”, el único boricua en el Salón de la Fama del Golf Mundial, ganó ocho eventos de la Asociación de Golf Profesional (PGA Tour) y con su legendario legado dejó sembrada una semilla más que importante. Hoy, a 26 años de que “Chi Chi” fuera exaltado al recinto de los inmortales de la disciplina, María Fernanda Torres completa su preparación para lanzar su nombre al estrellato deportivo.
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Y es que el pasado 3 de diciembre la boricua de 23 años logró sumar su nombre a los anales de la historia nacional al convertirse en la primera mujer golfista en reunir los quilates necesarios para competir en el Ladies Professional Golf Association (LPGA). Ahora, a solo días de participar en su primer torneo profesional, la hija de Borinquen asegura que solo aguarda por el momento de demostrar sus habilidades.
María Fernanda Torres arranca su participación en la LPGA el 25 de enero de 2018, lo que marcará un precedente histórico para el deporte nacional femenino. (José Encarnación / El Calce)
“Es emocionante, muy emocionante. Para mí es un honor y un privilegio poder representar a la mujer y también servir de ejemplo y de imagen positiva en medio de la situación que enfrenta Puerto Rico”, aseguró Marifé, a la vez que señaló que una de sus metas como atleta es servir de motivación para la juventud.
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La muchacha natural de San Juan lleva jugando al Golf aproximadamente 15 años. Por tanto, reconoce que en su disciplina deportiva también se pueden desarrollar proyectos comunitarios que sirvan para movilizar al pueblo y masificar el deporte con un fin positivo. Igualmente, la nuestra manifestó que de cara al futuro sus objetivos son muy claros.
“Quiero ser número uno. Ahora mismo me estoy preparando para dos torneos y luego para la gira completa. Una de las competencias es en las Bahamas y la otra en Australia. Mis objetivos son seguir preparándome, enfocarme y aprovechar todas las oportunidades que se me presentan”, dijo en referencia al Pure Silk-Bahamas LPGA Classic y al ISPS Honda Women’s Australian Open, eventos que se celebrarán del 25 al 28 del corriente y del 15 al 18 de febrero, respectivamente.
María subrayó el hecho de que la ruta a este sueño ha sido un reto mayúsculo, pues para lograr obtener una oportunidad en el profesionalismo tuvo que vencer las adversidades que surgieron tras el paso del huracán María. Sin embargo, la perseverancia y el deseo pudieron más que los daños que se produjeron en los campos de Golf del país. En ese sentido, Marifé se mantuvo perfeccionando su swing tirándole a un cubo en el patio de la casa de su abuela y enfocada en lo que hoy ya es parte de la historia.
“Ha sido una aventura y estoy muy feliz, porque queda demostrado que si uno se entrega y da el máximo, se puede lograr todo lo que uno se proponga. Deseo que Puerto Rico se levante y que más jóvenes como yo logren sus sueños”, sentenció, no sin antes puntualizar que la revolución femenina en el deporte borincano sigue.
De acuerdo a lo programado, la boricua partirá hacia las Bahamas este sábado para comenzar a escribir un nuevo capítulo en su vida. Según lo establecido en calendario, la temporada 2018 de la LPGA estará compuesta por 34 competencias distribuidas en 14 países, donde se pondrán en juego un total de $68.75 millones.
