La Federación de Maestros de Puerto Rico FMPR señaló que “a solo días del inicio del año escolar reina el caos en el sistema educativo y los maestros y maestras viven en el más grande desasosiego ante una verdadera masacre contra esa clase profesional”. El sindicato responsabilizó a la Secretaria de Educación Julia Keleher por la situación que, según indican, terminará afectando la calidad de la enseñanza y el aprovechamiento de los estudiantes.
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La Federación de Maestros, junto a otras organizaciones, promueve una demanda de 38 escuelas que exigen al Departamento de Educación no ser cerradas y cuyo caso comienza a verse este miércoles 1 de agosto en el Tribunal Superior de San Juan en Hato Rey.
En declaraciones escritas Mercedes Martínez Padilla, Presidenta de la FMPR, afirmó que la Secretaria Keleher y el gobierno saben de las consecuencias de los cierres de escuelas y los cambios efectuados. “Se lo advertimos de mil maneras. Previo a los cierres de escuelas advertimos que unos 6,000 maestros y maestras serían declarados excedentes. La Secretaria ha respondido que cínicamente que solo son 4,000, obviando los alrededor de 2,000 educadores que se acogieron a la llamada Transición Voluntaria ante la amenaza contra su estabilidad laboral. Hay cerca de 1,200 maestros que no tienen ubicación al dia de hoy. 2,675 están reasignados a escuelas distantes en otros pueblos de donde son sus plazas (en violación a la Ley 312 del 15 de mayo de 1938) y sin respetar los principios de mérito y antiguedad. Lo más doloroso es que, por primera vez, miles de maestros de vocación han tenido que marcharse del sistema educativo ante el caos generado”, dijo.
“Todo indica que tendremos un inicio de clases desastroso. Los niños y niñas serán las víctimas principales de esta desorganización y el desmantelamiento de las escuelas. Se ha aumentado el tope de estudiantes por salón provocando hacinamiento y afectando las posibilidades de una atención a las necesidades educativas de cada estudiante. Hay maestros sin plazas y plazas sin maestros. Las Bellas Artes y la Educación Física en las escuelas son algunas de las disciplinas que sufrirán con estas movidas Han convertido la supuesta “reforma educativa” en un mero instrumento para generar ahorros a costa de la formación de los niños. Han puesto el empeño del gobierno en abrirle el mercado a los privatizadores y las escuelas chárter y para ello necesitan precarizar la educación pública”, explicó Martínez Padilla.
La Federación de Maestros anunció que el sábado 4 de agosto realizará un compartir con maestros y maestras de la ciudad de Nueva York que hablarán sobre su experiencia con las escuelas chárter, los efectos sobre los niños y niñas de Educación Especial, el discrimen que la privatización genera y la resistencia en defensa de la educación pública. “El ataque contra la educación pública y las oportunidades de desarrollo de los hijos de la clase trabajadora es generalizado. Vamos a unir esfuerzos para defender el derecho de los estudiantes a una educación de calidad y accesible”, afirmó la portavoz federada.
La líder magisterial aprovechó para recordar que este miércoles 1 de agosto inicia el caso de 38 escuelas que la Federación de Maestros y el Frente Amplio en Defensa de la Educación Pública (FADEP) radicaron en el Tribunal Superior de San Juan para buscar detener el cierre de esos planteles. “El Departamento de Educación y las comunidades escolares sostienen una inusual carrera. El primero trata de llegar al tribunal con las escuelas desmanteladas de manera que sea difícil revertir los cierres atropellados. Los padres y madres, en cambio, van al tribunal en un reclamo de justicia para sus hijos e hijas. Esperamos prevalecer”, aseguró.
“Estamos frente a una encrucijada decisiva. O defendemos las escuelas, el derecho de los niños a su formación académica integral y los derechos del magisterio o destruyen el sistema educativo. De eso se trata”, subrayó Martínez Padilla.
La Federación de Maestros alertó a “estar listos, padres, madres y maestros, para ir a la calle a reclamar al gobierno que detenga el cierre de escuelas y cese de negarle los derechos a los maestros y maestras. Una verdadera reforma educativa nacerá de la base del magisterio y de los reclamos y propuestas de las comunidades escolares”.
Martínez Padilla concluyó asegurando que “conforme los componentes de las comunidades escolares estemos en disposición de dar la pelea, vamos a vencer”.