El gobernador Ricardo Rosselló Nevares pidió hoy a la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) que la isla se acoja a la quiebra mediante el título III.
El título III de la Ley para la Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico (Promesa, siglas en inglés) establece un proceso de reestructuración en una corte de quiebras en Washington.
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“Esto es una protección ante reclamos de que se coja todo el dinero que está en Hacienda para pagar un crédito. Eso es inaceptable”, afirmó en una conferencia de prensa en La Fortaleza, la mansión ejecutiva.
Agregó que “ante la realidad del calendario y ante la eliminación de la moratoria, así como frente al análisis de los créditos del gobierno, tome la decisión de solicitarle a la junta que Puerto Rico se acogiera al título III”.
Según el mandatario, la medida se toma “para trabajar en un plan estructurado bajo los parámetros del plan fiscal. No excluye que las negociaciones se puedan seguir dando”.
Subrayó en que “hemos llegado a esta decisión porque se defienden mejores intereses del pueblo de Puerto Rico”.
Rosselló Nevares opinó que “lamentablemente, algunos acreedores han objetado el plan fiscal y lo seguirán haciendo con el objetivo de aumentar el dinero que está disponible para ellos y, así, reducir el dinero disponible para el pueblo de Puerto Rico y los servicios esenciales”.
La solicitud del gobernador se da ahora debido que según la Ley Promesa primero debía existir un plan fiscal certificado y negociaciones de buena fe con los acreedores.