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Botan al director de apertura de Tokyo 2020 por chiste que hizo en el 1998

A Kentaro Kobayashi se le señaló por hacer una broma sobre el Holocausto en su acto de comedia, empleando la frase “Juguemos al Holocausto”

El comité organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio despidió el jueves al director de la ceremonia de apertura debido a un chiste sobre el Holocausto que hizo durante un programa de comedia en 1998.

La presidente del comité organizador Seiko Hashimoto anunció un día antes de la ceremonia inaugural que el director Kentaro Kobayashi había sido cesado. Se le señaló por hacer una broma sobre el Holocausto en su acto de comedia, empleando la frase “Juguemos al Holocausto”.

“Nos enteramos que el señor Kobayashi, en su presentación, usó una frase que ridiculizaba una tragedia histórica”, dijo Hashimoto. “Nos disculpamos profundamente por causar esta situación un día antes de la ceremonia de apertura y generar problemas y malestar a muchas partes involucradas, así como a la gente de Tokio y al resto del país”.

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Tokio ha sido salpicada por escándalos desde que obtuvo la sede de los Juegos en 2013. En Francia se investiga si se pagaron sobornos a miembros del Comité Olímpico Internacional para influir el voto a favor de la capital japonesa. Ello provocó que Tsunekazu Takeda, presidente del comité olímpico de Japón y miembro del COI, renunciara hace dos años.

“Nos disculpamos profundamente por causar esta situación un día antes de la ceremonia de apertura y generar problemas y malestar a muchas partes involucradas, así como a la gente de Tokio y al resto del país”.

La ceremonia de apertura de los aplazadas justas está prevista para la noche del viernes. La ceremonia se realizará sin espectadores para prevenir la propagación de contagios del coronavirus, aunque se permitirá la presencia de una cantidad limitada de dirigentes, invitados y periodistas.

“Vamos a tener una ceremonia de apertura mañana y ciertamente hay mucha gente que no está contenta con el inicio de los Juegos”, dijo Hashimoto. “Pero vamos a inaugurar los Juegos mañana bajo esta difícil situación”.

A inicios de esta semana, el compositor Keigo Oyamada, cuya música iba a ser usada en la ceremonia, debió renunciar tras ser duramente criticado por hostigar a sus compañeros de clase durante su infancia, incluyendo aquellos con discapacidad.

Oyamada habló sobre el abuso en entrevistas que concedió a revistas japonesas en la década de 1990. El segmento de su música no será usado.

Poco después que un vídeo y transcripción de la presentación de Kobayashi fueron revelada, las críticas abundaron en las redes sociales.

“Cualquier persona, sin importar cuán creativa sea, no tiene derecho a burlarse de las víctimas del genocidio nazi”, dijo el rabino Abraham Cooper, decano adjunto y director de acción social global del Centro Simon Wiesenthal, un grupo defensor de los derechos humanos en Los Ángeles. También mencionó que los nazis gasearon a los alemanes con discapacidades.

“Todo vínculo de esta persona con los Juegos Olímpicos de Tokio insultaría la memoria de 6 millones de judíos y sería una broma cruel de los Juegos Paralímpicos”, añadió.

Kobayashi fue un ex miembro de los Rahmens, un popular dúo de comediantes, y se hizo conocido por series de comedia.

Contra viento y marea, Japón ha insistido en sacar adelante los Juegos, pese a las recomendaciones en contra de muchos expertos sanitarios. Ello obedece en cierta medida a la presión del COI, que perdería un monto estimado de entre 3.000 y 4.000 millones de dólares en derechos de TV si los Juegos no se realizan.

El costo oficial de la cita olímpica es de 15.400 millones de dólares, aunque las auditorías gubernamentales han sugerido que la cifra real es mucho mayor. Todo el presupuesto, a excepción de 6.700 millones, es dinero publico.

“Nos hemos estado preparando durante el último para mandar un mensaje positivo”, dijo Hashimoto. “Hacia el final ahora hemos tenido tantos incidentes que le están dando una imagen negativa a Tokio 2020”.

Los escándalos en la víspera de la inauguración se dan justo cuando el gobierno del primer ministro Yoshihide Suga ha sido criticado por darle prioridad a los Juegos Olímpicos, pese a un repunte de casos de coronavirus.

La broma sobre el holocausto de Kobayashi y la renuncia de Oyamada se suman a una lista de escándalos que han remecido los Juegos. Yoshiro Mori renunció como presidente del comité organizador renunció por comentarios sexistas. Hiroshi Sasaki también dimitió como director creativo de las ceremonias de apertura y clausurar tras sugerir que una actriz japonesa se vistiera como una cerda.

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