El padre Peter Miqueli, quién se ha desempeñado en diversas iglesias del barrio del Bronx, en Nueva York, fue acusado de robar al menos un millón de dólares desde 2003, con el fin de financiar los servicios de un prostituto gay, automóviles y drogas.
Miqueli, quién actualmente se encuentra en la iglesia de San Francisco de Chantal, robó dinero de las ofrendas y diezmo de la feligresía, incluyendo el pago de $1,000 por cada sesión de “servicios” de un sexoservidor llamado Keith Crist, con quién sostenía relaciones de tipo sadomasoquista, que incluían beber orina y exhibicionismo.
El sacerdote despilfarró el dinero en la compra de drogas legales y de prescripción médica que utilizaba con su amante, además de comprar una casa y pagar la renta del apartamento de su “amo” sexual.
El caso en contra del padre señala que en el 2014 trabajadores de mantenimiento de la iglesia encontraron un montón de billetes regados por la residencia del padre Miqueli dentro de la rectoría.
Además de robar billetes de 20 dólares de las limosnas, Miquelo también se agenció dinero recabado para un nuevo órgano para la iglesia, además de que tuvo viviendo a su amante dentro de las instalaciones del templo durante una temporada.
Las autoridades católicas se han tomado “muy en serio” estas acusaciones, mientras que los fieles de la iglesia de San Francisco pidieron que el sacerdote ofensor sea removido.