Comentario

Columna: Creo en la estadidad para Puerto Rico y apoyo a mi selección boricua

Por Michael López Saldaña *

Con el furor que ha causado la excelente representación de Puerto Rico en el Clásico Mundial de Béisbol, vuelve a nacer la pelea chiquita entre puertorriqueños sobre la estadidad y nuestra representación olímpica.

Temas que solo demuestran que el deporte y la política no son compatibles y me veo obligado a realizar esta columna por la gran cantidad de desconocimiento que he visto por las redes sociales. Y es que se puede ser estadista y apoyar a Puerto Rico, no solo en el deporte, sino en todo lo que nos identifica como puertorriqueños.

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Muchos aprovechan el momentum para hacerse sentir los más patriotas y buscar menospreciar el valor y sentimiento que puede tener un puertorriqueño estadista al ver los suyos representándolos. ¿Si Nueva York se enfrentara a Estados Unidos en un juego de béisbol, los neoyorquinos no van a apoyar a Nueva York? ¿Si fuese Ponce vs Puerto Rico, los ponceños no van a apoyar a Ponce? ¿Si Puerto Rico es Estado, deja de ser del Caribe y se pega a la Florida? Pues así entonces no seríamos parte de la Serie del Caribe, ¿no? Con estas preguntas solo busco que piensen desde otras perspectivas sobre el tema. El hecho de que un puertorriqueño crea en la unión permanente con los Estados Unidos, no quita que cause gran emoción y orgullo, las gestas que hagan los nacidos en Puerto Rico aun siendo colonia, estado o independiente.

Dejando por un momento ese sentimentalismo del tema, vayamos a los argumentos: Te dicen que con la Estadidad, Puerto Rico automáticamente deja de tener representación olímpica, cuando es totalmente falso. El Comité Olímpico Internacional (COI) es una organización privada y nada tiene que ver con relaciones políticas entre territorios y naciones.  De hecho, en una entrevista el 29 de noviembre de 2011 para Primera Hora, el presidente de la Comisión Financiera del COI, Richard Carrión dijo a preguntas sobre si desaparece el Comité Olímpico de Puerto Rico con la Estadidad: “Que no se pongan nerviosos. Para nada. Eso no va a pasar.” Inclusive, otros territorios y naciones han pasado por situaciones similares, como por ejemplo, Taiwán y Hong Kong se unieron a China en el 1949 y 1997 respectivamente, y al sol de hoy, siguen teniendo representación olímpica. Aruba, isla del caribe constituyente al Reino de Países Bajos, sigue teniendo representación olímpica. ¿Por qué entonces es imposible para Puerto Rico?

Es entonces que te dirá que hay una ley federal que establece que no puede haber otro Comité Olímpico en los Estados Unidos. Esa ley que te hablan es la Amateur Sport Act de 1978. Ley que en ningún lado menciona que se le prohíbe a un nuevo Estado mantener su representación olímpica y de llegarse a tener una interpretación que no permitiera que Puerto Rico mantuviera su representación olímpica al convertirse en Estado, ¿acaso no se puede establecer en los términos en el Congreso bajo los cuales se incorpora Puerto Rico como estado? ¿Acaso es imposible enmendar una ley? Cientos de leyes se enmiendan anualmente.

Yo sé que nos emocionamos y se nos hincha el corazón cuando vemos a los nuestros lucir bien ante el Mundo. Pero de eso no se vive ni se mejora la calidad de vida de los puertorriqueños que seguimos siendo ante el Mundo un hazme reír. Somos la colonia más antigua del planeta Tierra, los que le imponen una Junta por encima de sus gobernantes, los que tienen su crédito en chatarra y los que viven más puertorriqueños en Estados Unidos que en su propia isla.

Si, en Estados Unidos, en esa nación que con el furor del juego llegas hasta a insultar, mientras allí viven la mayoría de los nuestros. Y es irónico la mentalidad del colonizado en contra del estadista, mientras que para que nuestros jugadores pudieran desarrollarse al nivel que juegan y hoy nos representen con orgullo, tuvieron que irse a la liga de béisbol de Estados Unidos. Inclusive, tuvieron que pedirles permiso a sus equipos en Estados Unidos para poder ponerse nuestro nombre en su pecho y ondear nuestra bandera contra ellos.

Si me vienes a decir que por ser estadista no amo a mi tierra y no me siento orgulloso sus logros, te tengo que decir, que la amo más o igual que tú, pero no menos que tú. Porque hasta de ser necesario, en el peor de los casos, sacrificaría esos momentos de gloria, porque nuestra gente mejore su salud, porque no se sigan dividiendo las familias yéndose a los estados y porque quiero darle una mejor isla a nuestras futuras generaciones. Que encuentren en Puerto Rico las herramientas para desarrollarse profesionalmente y eso incluye, el deporte.

Jugamos contra Estados Unidos y podemos insultar lo que queramos a los estadistas, pero cuando acabe el Clásico Mundial, te levantarás y seguirás viviendo en una colonia y con tus habichuelas amenazadas por una Junta. Mientras, el estadista seguirá luchando por lograr la igualdad de derechos y condiciones con cualquier otro estado. ¿Y #LosNuestros? Volverán a Estados Unidos a seguir jugando béisbol en la liga que soñaron algún día llegar.

*El autor es residente de Gurabo, y se dedica a la Consultoría en Comunicación y Política Pública. | Originalmente publicado en su blog Mi cara de la Moneda | Puedes seguirlo aquí

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