Caitlyn Jenner se ve mejor que tu abuela

Histórica.

Así se puede describir la última portada de la revista Vanity Fair que tiene como protagonista a Caitlyn Jenner, anteriormente conocida como Bruce Jenner y ex padrastro del clan de cabezas huecas y divas del mercadeo; las Kardashians. Muchos han criticado y despotricado contra la mujer transgénero, pero hay que recordar que los cambios sociales quedan marcados históricamente en portadas de revistas .

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En unos años cuando miremos al pasado diremos: “Caitlyn fue parte del avance del mundo”. Sin olvidar, que las protagonistas de portadas históricas, memorables y recordadas son Rolling Stone, National Geographic o Vanity Fair, entre otras. Los invito a dar un paso por la historia que está retratada en un solo click en Internet.

“La Jenner se ve mejor que tu abuela”. Es lo primero que pienso decirle a alguien cercano cuando ataca despectivamente, por capricho, envidia o simplemente llevarle la contraria al mundo y a la valentía de Caitlyn. Si, siendo gay en este mundo hay que ingeniárselas para que no te importe y te hiera la opinión de los demás, no me quiero imaginar el vía crucis de las personas que deciden vivir como se sienten y ponerse tacas, botas de vaquero o un par de tennis Jordan o LeBron, whatever, si así lo quieren y punto.

Lo que hizo esta mujer, sí señores porque es mujer, de salir en una portada con la imagen que siempre quiso es admirable. Eso hay que respetarlo. ¿Por qué muchas personas quieren que el mundo corra similar a su estilo de vida? ¿Tan difícil es aceptar a los demás como son y vivir y dejar vivir al prójimo como le plazca? Por ahí dicen que: “Cada cual hace con su trasero un tambor y busca quien se lo repique”. Un dicho cafre, pero tan real como la vida misma.

Mundialmente, cuando salió la espectacular portada de Caitlyn, muchos agarraron su teléfono móvil para atacarla en las redes sociales. “Es un macho, eso no se lo quita nadie”, “Después de viejo, ridículo”, “Tan fea. Cómo se atreve” y “Que responda ante Dios”. Fueron algunos de los comentarios con los que me topé. Seguramente estas personas no entienden que existe el libre albedrío y que hay que aceptarnos como somos, como dice la biblia. Ajá, porque muchos de estos, para colmo, se cantan cristianos y los más decentes del universo. (Como nota al calce, en estos comentarios ignorantes había un despliegue de errores ortográficos como suele suceder a diario en el barrio de Facebook)

Esto sonará repetitivo, pero a mí no me cabe en la mente como un ser humano no entiende que todos no somos iguales y existe la hermosa diversidad en el planeta Tierra. Tan fácil como que hay negros, blancos, chinos y colora&#39os con sabor como el niño de la pizpireta y versátil Burbu Burgos. A mí me fastidia y lo que me dan ganas es de perder el caché y decir varios improperios en sus caras de lechugas recién puestas en los refrigeradores del supermercado.

Estoy seguro que el mundo transgénero agradece la valentía y timbales de Jenner para vivir como quiere vivir. Como ella, en nuestro hermoso Borinquen existen miles de trans que luchan día a día con el discrimen en las calles. Esto les da un sabor de boca, así como lo hizo el guapetón de Ricky Martin a la comunidad LGBTT cuando salió del clóset y dijo al mundo su verdad en el 2010. Esto es un cambio social que ya debe ocurrir. La igualdad para las personas trans y la comunidad LGBTT es inminente, te guste o no. Claro, no sin antes aclarar que la orientación sexual e identidad de género son dos cosas diferentes y si no sabes cuál es la diferencia edúcate. En Internet, como ya dije, está todo en un solo click. Gugulea diría la pechugona de Maripily.

Así como ocurrió con las mujeres hace cuchuchientos años atrás que fueron discriminadas y señaladas por la sociedad, las comunidades mencionadas viven lo mismo actualmente. Que no sé cómo algunas mujeres tienen el cuero de criticar tanto cuando su género fue silenciado, castigado, humillado y pisoteado durante tanto tiempo. Si hoy las féminas tienen derecho al voto y a trabajar, entre otras cosas, es porque hubo un cambio social e histórico que marcó al mundo para bien.

En fin, a ti que criticas a Caitlyn o alguna persona homosexual o a alguien diferente a tu anatomía caribeña, te dijo que: “La Jenner se ve mejor que tú, tu madre y tu abuela que seguramente está diez metros bajo tierra”.