Cómo ya es uso y costumbre, el gobernador Ricardo Rosselló, cuando era candidato tenía una manera bien distinta de atender la situación en la Universidad de Puerto Rico.
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Era para verano del 2016 cuando la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico, controlada por el Partido Popular Democrático, aprobaba eliminar la moratoria del aumento escalonado en la matrícula, con efectividad para el próximo semestre académico.
En aquel entonces, el candidato Rosselló tomaba las redes sociales y se expresaba en contra del aumento, argumentando que de llegar a la Fortaleza iban allegar gran parte de los $500 millones anuales que se gastan en adiestramientos a servidores públicos, para que fuesen ofrecidos por la UPR.
Hoy, mientras se discute un posible recorte de 300 millones en la principal institución universitaria del País la Fortaleza no se ha expresado sobre la propuesta de la UPR de aumentar la matrícula, con una fórmula ajustada los ingresos de los estudiantes.
Un borrador del plan fiscal propuesto por la Universidad, establece que como parte de la matrícula ajustada a los ingresos, los 16,800 estudiantes sin Beca Pell pagarían de $56 a $78 por crédito. Mientras, que los estudiantes con Beca Pell que ascienden a los 39,200 pagarían $56 a $70 por crédito. Por su parte, los 6 mil estudiantes graduados pagarían de $140 a $175.
Cómo cambian las noticias.
